miércoles, 28 de mayo de 2014

CAMBIALO, ENSEÑASELO

QUERER NO ESTÁ DE MODA

Solemos caer en el error de obsesionarnos con el pasado y dar vueltas una y otra vez a lo que hicimos mal y, todavía más, a lo que nos hicieron peor. Y me resulta triste. Hay tantas formas de querer en presente y malgastamos el tiempo, invirtiéndolo en intentar cambiar eventos inamovibles y añorar situaciones que ya fueron escritas hace mucho. La mayoría de las personas tienes la grandísima suerte de conocer y compartir grandes momentos en este mismo instante con padres, hermanos, abuelos, tíos, primos, amigos y, cómo no, másqueamigos. Sin embargo, nos dedicamos a lamentarnos por cómo quisimos en un pasado y en pensar en qué habría sucedido si la suerte nos hubiese sonreído de otra manera, si la música hubiese sonado a otro ritmo, o si nos hubiesen dado una mano mejor con algún que otro as.
¿Por qué tanta obsesión con algo tan remoto como el pasado si ya está lejos?
Yo creo que la respuesta es sencilla: el presente da miedo.
Es retador. Es difícil. Te da en las narices. De golpe. Es ese muro gigante contra el que te chocas. El que requiere escalarlo y sudar para conseguir llegar al otro lado. Ese.
Pero lo que más caracteriza al presente es que es el momento en el que menos información tenemos a la hora de actuar y eso complica la situación en el momento de decidir.
¿Cuántas veces decimos “si en el momento lo hubiese sabido habría hecho las cosas de otra manera”? El pasado es fácil porque controlas la situación. Sabes todo de él. Del ahora en realidad no sabes nada. Las decisiones las tomamos en base a corazonadas y después tiramos los dados, cruzamos los dedos y esperamos que todo salga bien.
Y por eso es más fácil decir que quisiste a alguien, no que lo quieres ahora. Lo que pasa es que para querer, en presente, hoy, ahora, en este mismo instante y no otro, hay que servaliente. Hay que echar toda la carne al asador y lamentablemente eso no está demasiado difundido. Según nos vamos haciendo más mayores aprendemos, a modo de coraza, a idealizar las relaciones y momentos pasados, en vez de valorar lo que tenemos en la actualidad. Algunos directamente cambian lo que en verdad significó y lo que sucedió, mezclando una extendidísima imaginación, deseos frustrados y mentira poco original con mucha maestría y alguna que otra dosis de realidad, porque “sino sería inventárselo del todo”. Explotamos al pasado hasta que no le queda ni una sola gota de jugo, nos evadimos con él cuando lo consideramos oportuno y el pobre no tiene ni voz para quejarse.
Y es que cuando la realidad choca, recurrimos a este tipo de trucos, engañándonos tan solo a nosotros mismos. El problema es que la realidad es cruda pero, ante todo, es real. Y eso es lo importante que con demasiada frecuencia decidimos olvidar.
Es más fácil haber querido que querer en presente porque querer a alguien es mantener esa promesa cuando ya no te conviene. Es hacer que todas las palabras que algún día dijiste en estado de euforia máxima sigan teniendo el mismo sentido en los malos momentos. Es estar dispuesto a luchar hasta el final y poner las necesidades de otra persona muy por encima de las tuyas. Es decir adiós la egoísmo, al “yo y sólo yo”. Es no tirar la toalla en cuanto se avecina tormenta. No es sólo tragarte el orgullo, sino que es dejarlo tirado en la cuneta y abandonarlo para siempre. Sayonara, baby. Es convertir sus alegrías en las tuyas, e ir más allá, haciendo lo mismo con las penas, para bien o para mal. Es aprender a ceder y a olvidarte de la ley del talión. Es saber seguir tirando del equipo cuando haya una lesión. Es estar dispuesto a poner la otra mejilla, como mínimo.
Y sobre todo es dejar de decir “querer”, y transformarlo con el tiempo en “amar“. “Querer” para mí suena a infatuación, a posesión y deseo efímeros. “Amar” está en otro nivel, es entregarse. Querer se llegará a querer a un puñado o dos, pero amar, sólo se ama a una persona en la vida.
Y aunque perdamos el rumbo y nos repitamos lo contrario, no nos podemos olvidar del objetivo final al que todos aspiramos: amar en presente y futuro, y dejar de querer en pasado.

“El amor no tiene nada que ver con lo que tú esperas obtener, sino con lo que tú esperas dar, que es todo.”




domingo, 20 de abril de 2014

SI POR UN INSTANTE...

Realmente no se sabe si esta carta es de Gabriel García Márquez o no, sólo sé Ana, que hoy te ha llegado y has podido leerla, te ha llegado en el momento justo. Cuando más lo necesitabas.
Recuerda que la alegría de vivir no te la puede quitar nadie, ni si quiera las circunstancias que te rodean, porque la alegría es algo tuyo, que creas tú y que a pesar de todo puedes recrearla cuando quieras.
Vivir sin alegría no es vivir. Recuerda que todo lo que tienes, por muy poco que sea (que siempre es más de lo que puedes llegar a pensar) es motivo para dar gracias y peso suficiente para priorizar tus problemas y poder sonreír, minimizando lo que no es importante y dando gracias y viviendo lo que sí lo es.
Sigo creyendo a pesar de todo que la vida es hermosa. Pero sé de sobra que creer no es suficiente, también hay que vivir.
Qué agradecida estoy y qué ganas tengo de trasmitir todo esto a la sociedad que puede que vuelva a llenarnos de ESPERANZA Y LIBERTAD.

“Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo y me regalara un trozo de vida, aprovecharía ese tiempo lo más que pudiera. Posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva pensaría todo lo que digo.
Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan.
Dormiría poco, soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz.
Andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen.
Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol, dejando descubierto, no solamente mi cuerpo, sino mi alma.
A los hombres les probaría cuan equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse.
A un niño le daría alas, pero le dejaría que el solo aprendiese a volar.
A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez, sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres… He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada.
He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por primera vez, el dedo de su padre, lo tiene atrapado por siempre.
He aprendido que un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse.
Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, pero realmente de mucho no habrá de servir, porque cuando me guarden dentro de esa maleta, infelizmente me estaré muriendo.
Trata de decir siempre lo que sientes y haz siempre lo que piensas en lo más profundo de tu corazón.
Si supiera que hoy fuera la última vez que te voy a ver dormir, te abrazaría fuertemente y rezaría al Señor para poder ser el guardián de tu alma.
Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo, te diría “Te Quiero” y no asumiría, tontamente, que ya lo sabes.
Siempre hay un mañana y la vida nos da siempre otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero, que nunca te olvidaré.
El mañana no lo está asegurado a nadie, joven o viejo. Hoy puede ser la última vez que veas a los que amas. Por eso no esperes más, hazlo hoy, ya que si mañana nunca llega, seguramente lamentaras el día que no tomaste tiempo para una sonrisa, un abrazo un beso y que estuviste muy ocupado para concederles un último deseo.
Mantén a los que amas cerca de ti, diles al oído lo mucho que los necesitas quiérelos y trátalos bien, toma tiempo para decirles, “lo siento” “perdóname”, “por favor”, “gracias” y todas las palabras de amor que conoces.
Nadie te recordará por tus nobles pensamientos secretos. Pide al Señor la fuerza y sabiduría para expresarlos.
Finalmente, demuestra a tus amigos y seres queridos cuanto te importan".
ÁNIMO Y NO LO OLVIDES.


miércoles, 5 de marzo de 2014

MAGIA.

Hoy me han dicho "educar es lo más maravilloso del mundo".

Se me han escapado algunas lágrimas mientras me decían "Ser maestro es enseñar a quererse, a confiar en uno mismo, a valorarse..."

También me han dicho: "Hay que enseñar que lo urgente no es siempre lo más importante, hay que trasmitir la importancia de las prioridades y que si no te quieres tú, no estás dejando que te quiera nadie".

Hoy he aprendido muchas lecciones y una de las más importantes ha sido: "Educas con el ejemplo sin ser maestro".

Nunca me habían mirado a los ojos diciéndome "sé valiente".

Tengo mucha suerte al poder contar con personas maravillosas, por poder contigo. Eres muy grande y seguramente no sepas cuánto puedes ayudar, en qué momento tan preciso regalas tus palabras, tu mano y tu mirada. Gracias Hada mágica, realmente eres un hada.

"Si educásemos a más personas tendríamos que salvar menos vidas"


Quiero ser maestra, gracias por ayudarme a querer serlo con más fuerza.

martes, 25 de febrero de 2014

FELICIDAD

Ana,

Hoy han venido a clase varios chavales con discapacidad intelectual y nos han estado hablando (se han abierto) de su experiencia pasada en el ámbito educativo.

La herida está abierta, el desastre es obvio, el dolor es grande y el cambio debe ser inmediato.

Creo que los que no "normales" somos nosotros, que los complicados somos nosotros y que los que deben aprender a vivir y tener paciencia con nosotros, son ellos.

El mundo hoy me ha parecido más bonito, el día ha mejorado y mi visión se ha transformado.

Ana, trabaja, lucha, esfuérzate y quiéreles mucho, todos ellos, todos tus alumnos (sin saberlo), en un periodo de tiempo no muy largo, te necesitan para ser felices. Hazlo bien.

Hoy J.J, me ha hecho sentir vergüenza mientras hablaba y nos ha dicho algo que me ha llegado a lo más profundo. Lo he guardado, lo he meditado...hazlo otra vez:

 
"El mejor profesor no es el que más enseña, sino el que consigue que sus alumnos saquen y logren lo mejor de sí mismos y consigan sus propósitos"- J.J
 
Y me pregunto...

¿Voy a ser maestra o alumna?

miércoles, 19 de febrero de 2014

POSIBILIDADES.

Todas las mañanas me levanto e intento pensar que todas las personas que tengo a mi alrededor me pueden ayudar. Me pueden completar. Ofrecer actitudes nuevas, visiones diferentes, horizontes desconocidos, conocimientos maravillosos...creo que todas las personas somos un inmenso mar de posibilidades y eso me llena de esperanza, de bondad, de cariño y de ganas por conocer a más personas, absorber todo lo bueno de cada uno. 
Me encanta la vida, la humanidad y todas las oportunidades que tenemos y se nos regalan cada día (las 24 horas). Ojalá saber aprovechar mejor todo. 
Y deseó poder complementar, estar atenta y al servicio de todo el que me necesite, creo que así el mundo giraría feliz, contento y seríamos menos conformistas. Tenemos una gran responsabilidad con la humanidad. Cada uno de nosotros, con nuestro poquito se hace un muchito.
Esperanza y... TODOS PARA UNO Y UNO PARA TODOS. 
Que frase tan acertada, y que profesora tan maravillosa (Irune).
No lo olvides nunca Ana. Mares llenos de posibilidades :)


"Yo hago lo que usted no puede, y usted hace lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes cosas" - Madre Teresa de Calcuta 

jueves, 30 de enero de 2014

SUMA Y SIGUE...

Ana,

En España, país donde cambian la “Ley de Educación”, como cambiamos de ropa interior…cosa que paso de comentar, porque me entran ganas de tirarme de los pelos y no quiero…bueno sí, quiero comentar algo: Los cambios, en la vida, en las leyes, en las personas, en las decisiones…tienen que estar enfocados a la mejora, al progreso. Tienen que ir dirigidos a la perfección (aunque nunca se alcance) y con eso ya te digo todo.

Veo este video de mi admiradísimo entendido y saco todo esto (todo esto que te dejo por escrito para que te refresque, que siempre viene bien. Ah y para que te arranque una sonrisa de las tuyas):

“Los primeros años de vida de un niño y una niña son los más importantes”.

“Deben aprender a sumar conocimientos, no a competir entre ellos…el motor que debe hacer girar a la escuela es la felicidad”

“La sociedad de nuestros nietos (los que ahora son ciudadanos pequeños), será la sociedad que ellos quieran y me encanta pensar que pueda ser una sociedad de gente feliz y realizada”.

“En los primeros años se ponen los cimientos d lo que se va a hacer y realizar a lo largo de la vida. Por eso la educación infantil y primaria es importantísima. Mas que la universitaria. Es más los maestros trabajan mas horas que los profesores universitarios y se les paga menos”.

“La diversidad nunca puede ser un criterio de exclusión, los niños deben compartir sus capacidades, no separar la escuela y diferenciarla”.

“La evaluación de una persona tiene  que medir el progreso, no el valor absoluto”.

“ Hay que apoyar a los maestros buenos, se sienten aislados (por los padres, el nuevo centro…)”.

“La educación es importante para los padres, si la pensamos correctamente tiene una relación muy fuerte con la felicidad y cuando los padres tienen un hijo solo esperan que sea feliz (Esa es nuestra naturaleza, para eso hemos nacido)”.

“NO PODEMOS RECHAZAR POR LO QUE HEMOS NACIDO (FELICIDAD), PARA SER LO QUE EL MERCADO PIDE”

Nada más que añadir. Todo por hacer.


¡Ánimo bonita!


viernes, 24 de enero de 2014

ALEGRÍA Y AGRADECIMIENTO



Irune,

Todo el blog, motivaciones, curiosidades, enseñanzas olvidadas y no tan olvidadas… me las he dirigido a mi misma. Sí a mi misma.

En la carrera llevan repitiendo más o menos como tres años, eso de “aprendizaje significativo”. ¿Pero sabes que es lo más gracioso? Te vas a morir de risa de verdad: No se que narices es eso, por no decir que coño es eso, porque por mucha didáctica y esas cositas…no me han enseñado así.

Ya sabes ¿No? Así nos movemos en este país, pedimos pero no damos. Nos dicen como tenemos que ser dentro de dos años (un poco menos) y no nos dan ejemplo. Aunque siempre hay maravillosas excepciones, no hay que ponerse tremendista, nada de dramas.
Pero te prometo que no entiendo nada. En alguna clase me han entrado ganas de levantarme en la mesa y gritar “¿Qué haces con tu vida señor/señora?”, pero bueno, mejor sentadita.

Perdí mi vocación. Si la perdí. Doy gracias por que lo se pierde, tiene la ventaja de que puede ser encontrado y así ha sido.

En fin Irune, mira no me suelo ir por las ramas. ¿Sabes cuánto porcentaje tienes que ver en ese encuentro de mi felicidad? Sí, de mi felicidad en todo lo que hago y proyecto en mi mente. Pues tienes al menos un 80%. Si te parece poco deja de leer esto y si tienes curiosidad, puedes continuar.

Eres una persona que lo que dices, lo haces y lo que pides, lo muestras antes. En mi vida de estos tres años de carrera que llevo estudiando, pocos profesores me ha enseñado enseñando.

Es muy triste, de verdad. Pero no importa, porque siempre llega alguien que desmonta la regla. Esto me pasa tanto... que por eso me encantaría tatuarme en alguna parte del cuerpo la palabra “esperanza”.

Has sido una de las pocas profesoras de la carrera, junto a otro más que me han enseñado significativamente (no me gusta mentir). ¿Es de mal gusto decirlo? Pues lo siento mucho, hay que aplicarse el cuento, como se suele decir por ahí…

Me han enseñado los mil doscientos infinitos problemas que hay en la educación de hoy y de aquí. El año pasado me volvía algunos días en el autobús más amargada que el que tiene 80 años y aun no se ha dado un beso en la boca, porque todo eran problemas y no conocía ninguna solución, además aprendía tan poco que ni siquiera era capaz de darlas yo misma (ni pensarlas, al menos).

Y “PUM” de repente tengo a una profesora cuyo ejemplo es mi: “quiero ser como ella de mayor”. No me gustan los tatuajes, solo tengo un pendiente de más en la oreja, cada vez me influye menos lo que piensen de mi (pero a veces me afecta) etc etc etc pero tú que eres todo lo contrario me has mostrado todo lo que necesitaba hoy.

Por cada 10 problemas me has enseñado 60 soluciones. Todo absolutamente todo lo que he aprendido contigo quiero ponerlo ya en práctica.

Esa pasión por la lectura se puede o no se puede tener, pero ese afán de trasmitírsela a los que aun no saben casi ni como se apellidan...esas actividades, esa evaluación por competencias, ese “no querer ir a pillar” si no a enseñar…joder Irune, perdóname pero es que me emociona. Tengo ganas de acabar para poder solucionar (aunque solo sea en mi aula, mis 20 niños). Creo que ya sé lo que es un aprendizaje significativo. Por qué ese aprendizaje no se puede enseñar, se tiene que vivir.

Tanta oscuridad y de repente…¡Un rayo de esperanza! Si es que nunca falla. Poquito a poco y siempre con ella.

Quiero ser esa maestra que muestra para que ellos sepan usar. Que enseña, para que ellos aprendan a ser felices, sí solo quiero eso. Personas cultas y felices que obviamente choquen contra todo lo nos encontramos hoy. Personas que se rían mientras esperan las colas del metro, del bus, del estanco, de la compra o de pagar la cerveza, que ayudan a ser felices a los demás (aunque solo sea por un día, un minuto o una hora), personas que encuentren un sentido a lo que hacen. ¿Qué  tienen que saber menos sobre las oraciones subordinas para poder ser felices o al menos buenas personas? pues mira lo siento mucho, no es lo prioritario.

De verdad que nos hemos deshumanizado, pero…siempre con esperanza. Me revientan las quejas y quejas y quejas, por favor que esto no se vea así. Me gusta mucho la verdad. Si buscarla y hablar de ella.

Si supiera darte las gracias por todo tu trabajo, implicación, esfuerzo, mil y unos quebraderos de cabeza para saber como llevar la clase, esa transmisión de tu pasión, ese interés, cambio y formación continua. Te las daría como es debido.

Al fin he aprendido de un profesor que únicamente me ha enseñado siendo eso, profesor.

Y solo quiero recordar que…

“LIBEÑOTAD”

Lo único que no pueden quitarnos, si nosotros no queremos son las ganas de soñar y nuestra propia libertad. Cuantas veces se nos olvida y cuantas veces me los has recordado Irune. Pero lo mas maravilloso de todo esto es que me lo has recordado sin pronunciar la palabra “soñar” ni la palabra “libertad”.

Ojalá parecerme a ti un poquito más cuando por fin sea educadora y tenga ese arrojo que te caracteriza, ese ser luchadora y ese esfuerzo continuo por mejorar, sin quedarte en los malditos problemas que a muchos ciegan y ya no ven más allá. Que pesados, pero pobrecitos.

Mil gracias Irune, ojalá saber dártelas mejor.